Miércoles Santo por la tarde: El Silencio.
Los miembros de la cofradía del Silencio llenan el atrio con sus cirios pascuales, caperuces, promesas, nostalgia, plegarias y emociones. El tiempo parece detenerse cuando la figura de Cristo aparece en el calvario de la plaza de la iglesia. Esta escultura apareció por primera vez en procesión en 1902 y en 1905 se fundó la cofradía que lleva su nombre: el Cristo de las Injurias, Cristo en su agónica muerte de cuyos labios parece brotarle sus últimas palabras moribundas. Cristo de las tres miradas, escultura anónima erróneamente atribuida a Gaspar Becerra. Esta, según la opinión de muchos expertos en arte religioso, es la escultura más importante de la imaginería religiosa española.